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La Spagna sta affrontando una delle peggiori catastrofi naturali della sua storia recente. Le alluvioni che hanno colpito il sud-est del paese hanno causato finora 158 vittime, con 155 decessi concentrati nella Comunità Valenciana, due in Castiglia-La Mancia e uno a Malaga. La situazione è particolarmente critica a Paiporta, dove il sindaco ha riferito di “decine di morti” a seguito di quella che è stata descritta come la peggiore tempesta del secolo, paragonabile solo a due eventi negli anni ’80. Un fenomeno meteorologico eccezionale. L’evento atmosferico responsabile di questa devastazione è noto come DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), una depressione isolata in quota che provoca precipitazioni intense e persistenti. Questo fenomeno si verifica quando una massa d’aria fredda in alta quota si isola dalla circolazione generale, interagendo con l’aria calda e umida presente al suolo. La combinazione di questi fattori genera temporali violenti e precipitazioni abbondanti in un breve lasso di tempo. In questo caso, la DANA ha colpito con particolare intensità la regione di Valencia, dove in alcune zone sono caduti oltre 160 mm di pioggia in un’ora, trasformando le strade in fiumi impetuosi e causando danni ingenti a infrastrutture e abitazioni. In risposta alla devastazione, il Primo Ministro Pedro Sánchez ha dichiarato l’intera area come “zona catastrofica” e ha annunciato l’impiego di ulteriori risorse, compreso il supporto dell’Unione Europea per le operazioni di soccorso e recupero. La Protezione Civile e l’esercito stanno collaborando in operazioni di soccorso, con 1.000 soldati già dispiegati, mentre il sistema di allerta di emergenza è stato attivato sui cellulari delle zone a rischio, una misura adottata per la prima volta. Le autorità continuano a chiedere ai residenti di evitare spostamenti vicino a fiumi e dirupi, dato che il fronte temporalesco è ancora attivo in molte aree della penisola. Gli esperti sottolineano che eventi meteorologici estremi come questo potrebbero diventare più frequenti a causa dei cambiamenti climatici. L’aumento delle temperature globali contribuisce a intensificare fenomeni come le DANA, rendendo le precipitazioni più violente e imprevedibili. È fondamentale che le autorità e la popolazione siano preparate ad affrontare tali emergenze, implementando sistemi di allerta efficaci e adottando misure preventive per mitigare i danni. La Spagna si trova ora a dover affrontare una lunga fase di ricostruzione, con l’obiettivo di ripristinare le comunità colpite e rafforzare le infrastrutture per prevenire future catastrofi.
Inundaciones en España: el número de víctimas asciende a 158; evento meteorológico sin precedentes
España enfrenta una de las peores catástrofes naturales de su historia reciente. Las inundaciones que han afectado al sureste del país han causado hasta ahora 158 víctimas, con 155 fallecimientos concentrados en la Comunidad Valenciana, dos en Castilla-La Mancha y uno en Málaga. La situación es especialmente crítica en Paiporta, donde el alcalde ha informado de “decenas de muertos” tras lo que ha sido descrito como la peor tormenta del siglo, comparable solo a dos eventos en los años 80. El evento atmosférico responsable de esta devastación es conocido como DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), una depresión aislada en altura que provoca precipitaciones intensas y persistentes. Este fenómeno ocurre cuando una masa de aire frío en altura se aísla de la circulación general, interactuando con el aire cálido y húmedo en superficie. La combinación de estos factores genera tormentas violentas y precipitaciones abundantes en un corto periodo de tiempo. En este caso, la DANA afectó con especial intensidad la región de Valencia, donde en algunas zonas cayeron más de 160 mm de lluvia en una hora, convirtiendo las calles en ríos caudalosos y causando grandes daños a infraestructuras y viviendas. En respuesta a la devastación, el Primer Ministro Pedro Sánchez ha declarado toda la zona como “zona catastrófica” y ha anunciado el despliegue de más recursos, incluido el apoyo de la Unión Europea para las operaciones de rescate y recuperación. La Protección Civil y el ejército están colaborando en labores de rescate, con 1.000 soldados ya desplegados, mientras que el sistema de alerta de emergencia ha sido activado en los teléfonos móviles de las zonas de riesgo, una medida adoptada por primera vez. Las autoridades siguen pidiendo a los residentes que eviten desplazarse cerca de ríos y barrancos, dado que el frente tormentoso sigue activo en muchas áreas de la península. Los expertos destacan que eventos meteorológicos extremos como este podrían volverse más frecuentes debido al cambio climático. El aumento de las temperaturas globales contribuye a intensificar fenómenos como las DANAs, haciendo las precipitaciones más violentas e impredecibles. Es fundamental que las autoridades y la población estén preparadas para enfrentar tales emergencias, implementando sistemas de alerta efectivos y adoptando medidas preventivas para mitigar los daños. España ahora se enfrenta a una larga fase de reconstrucción, con el objetivo de restaurar las comunidades afectadas y fortalecer las infraestructuras para prevenir futuras catástrofes.
